Uso de «dentro» y «adentro»

Dentro

1. Adverbio de lugar que significa ‘en la parte interior’. Lleva siempre un complemento con de, explícito o implícito, que expresa el lugar de referencia: «Se oye su voz rota por las dos balas que lleva dentro» (ASantos Estanquera [Esp. 1981]); «Algo se desmoronó dentro de su cabeza» (Martínez Evita [Arg. 1995]). Cuando el complemento con de está explícito, en el habla coloquial o popular americana se emplea indebidamente el adverbio adentro en lugar de dentro. Aunque dentro se usa normalmente con verbos que indican estado o situación, también se utiliza con frecuencia con verbos de movimiento y puede ir precedido de las preposiciones de, desde, hacia, hasta, para o por: «No venía de dentro de la casa, sino por la parte del jardín» (CBonald Noche [Esp. 1981]); «Suelta el perro y corre hacia dentro de la casa» (Santiago Sueño [P. Rico 1996]).

2. Puede usarse también precedido de la preposición a: «Los habitantes de la casa se volvían a dentro riñendo a la sirvienta» (Goytisolo Estela [Esp. 1984]), pero en ese caso es preferible y mayoritario hoy el empleo del adverbio simple adentro.

3. Por su condición de adverbio, no se considera correcto su uso con posesivos: dentro mío, dentro suyo, etc. (debe decirse dentro de mí, dentro de él, etc.).

4. Seguido de la preposición de y un sustantivo de significado temporal, forma una locución preposicional que expresa el tiempo que falta para que algo suceda o tenga lugar: «Dentro de diez minutos estoy allí» (CBonald Noche [Esp. 1981]). El uso en estos casos de la preposición en está influido por el inglés y, a pesar de su extensión, debe ser evitado: «Si Raúl no aparece en cinco minutos, me largo» (Mendizábal Cumpleaños [Esp. 1992]).

Adentro

1. Adverbio de lugar que, con verbos de movimiento explícito o implícito, significa ‘hacia la parte interior’: «Enseguida la condujo adentro» (Montero Trenza [Cuba 1987]); «Lo he empujado ahí adentro» (Hernández Naturaleza [Esp. 1989]). También se emplea para indicar estado o situación, con el significado de ‘en la parte interior’, aunque ello es más frecuente en América que en España, donde para expresar situación lo normal es usar dentro: «Ya estás adentro y eres incapaz de salir» (Volpi Días [Méx. 1994]); «Lo llevo tan adentro» (Sampedro Sonrisa [Esp. 1985]). Puede combinarse con las preposiciones de, desde, hacia, hasta, para o por, nunca con la preposición a, ya incluida en la forma de este adverbio: Nos fuimos a adentro (correcto: Nos fuimos adentro). En España, precedido de preposición, es más normal el uso de dentro

2. En el español de América, en registros coloquiales o populares, no es infrecuente que adentro vaya seguido de un complemento con de: «Lo encontraron calcinado adentro de su automóvil» (Clarín [Arg.] 22.10.02). Pero, en general, es uso rechazado por los hablantes cultos y se recomienda evitarlo en el habla esmerada; en esos casos debe emplearse dentro.

3. Por su condición de adverbio, no se considera correcto su empleo con posesivos: adentro mío, adentro suyo, etc. (lo correcto es dentro de mí, dentro de él, etc.).

4. Como sustantivo, se usa en plural, generalmente precedido de posesivo, con el sentido de ‘parte interior’: «El árbol estaba totalmente seco y con los adentros huecos» (Elizondo Setenta [Méx. 1987]); «Se dijo para sus adentros que no compensaba el riesgo» (Mendoza Verdad [Esp. 1975]).

Fuente: Diccionario Panhispánico de Dudas de la Real Academia Española.

El Censo 2010 en EE. UU. revela un crecimiento sostenido de la población hispana

De acuerdo con la información demográfica recogida a partir del Censo 2010 en los Estados Unidos, la población latina totaliza actualmente el 16,3% de los habitantes del país. La población hispana aumentó 43% durante los últimos diez años, con un incremento de 35,3 millones a 50,5 millones. Además, los demógrafos informaron que el 56% de la expansión de la población total del país durante la última década puede ser atribuida a los latinos.

Aun cuando, en cifras sin procesar, el crecimiento de la población latina durante los últimos diez años superó los valores totales de décadas anteriores en lo que respecta al porcentaje del índice de crecimiento, la población hispana creció más lentamente que en años pasados. Por ejemplo, la población latina experimentó índices de crecimiento que superaban el 50% en las décadas de 1980 y 1990. No obstante, la primera década del siglo XXI fue testigo de un incremento del 43%.

Los hispanos, que se identifican a sí mismos con cualquier raza u origen étnico, conforman el grupo minoritario más numeroso del país. Conforme a la raza, el 53% de los latinos —es decir 26,7 millones de personas— se identifican a sí mismos como personas de raza blanca. El siguiente grupo más destacado, compuesto por el 36,7% (18,5 millones) de latinos, se identifica como perteneciente a “alguna otra raza”. Un 6% adicional avaló la opción de múltiples razas u orígenes étnicos.

En cuanto a la distribución geográfica, la mayoría de la población latina permanece en nueve estados con importantes comunidades hispanas establecidas: Arizona, California, Colorado, Florida, Illinois, Nuevo México, Nueva Jersey, Nueva York y Texas. Sin embargo, durante la última década la tendencia ha sido de dispersión, ya que el porcentaje de latinos que viven en otros estados está en aumento.

Los estados al sudeste del país, entre ellos Alabama, Arkansas, Kentucky, Misisipi, Carolina del Norte, Tennessee y Carolina del Sur, registraron algunos de los crecimientos más sorprendentes en la población latina. Maryland y Dakota del Sur también experimentaron una duplicación de su población hispana durante la última década.

En seis estados —Illinois, Luisiana, Massachusetts, Nueva Jersey, Nueva York y Rhode Island— el incremento en la cantidad de latinos constituyó la totalidad del crecimiento de la población en esos estados. Si la población latina no se hubiese multiplicado, esos estados habrían experimentado un crecimiento negativo.

El conteo de latinos del censo fue ligeramente superior a lo que se había anticipado. Los resultados del Censo 2010 para los hispanos arrojaron una cifra de 955.000 más personas de lo que la Oficina del Censo de los Estado Unidos había calculado para este segmento de la población.

Fuente: The Pew Hispanic Center